Mike Portnoy, como últimamente he
ido publicando, lamenta profundamente no poder hablar abiertamente de su
antigua banda Dream Theater debido a la respuesta emocional que se genera. Cree
que lo había superado con la banda que él mismo había fundado y de la que se
marchó de forma inesperada en 2010.
Pero la verdad es que conserva
buenos recuerdos del tiempo que pasó con el grupo y está agradecido por la
tolerancia que mostraron con su trastorno obsesivo-compulsivo. Según cuenta el
batería en la revista Modern Drummer, “con Dream Theater pasé mucho tiempo
porque mi desorden obsesivo me permitía asumir funciones adicionales. Por
suerte, los chicos siempre confiaron en mí. Mi trastorno puede ser un perjuicio
sin embargo. Se que a veces vuelvo loca a mi esposa, y estoy seguro que volví
loco a los chicos de Dream Theater muchas veces también. Pero convivían con él.
Cuando conocía John Petrucci y John Myung, cuando teníamos 18 años, creo que
pronto se dieron cuenta de esa parte de mi personalidad y se sentían cómodos
con esa dinámica. Petrucci y yo nos mantuvimos equilibrados durante los años.
Nunca mostró preocupación por los pequeños detalles y esas cosas de la
organización, así como yo nunca me preocupé por los aspectos comerciales o
financieros en los que él era muy bueno.”
Portnoy siente que una de las
principales razones por las que decidió dejar la banda fue que “yo cambié. Digo
esto de manera diplomática, pero cuando escuché el nuevo material simplemente
pensé que no era de mi agrado. Es muy bueno, pero no podía relacionarme con
ello nunca más. La gente cambia, bien como oyente o como artista.”
Sin embargo, la separación y las
disputas públicas llevaron al batería a medir sus palabras: “Me siento mal
cuando no puedo hablar abiertamente de Dream Theater sin ser despedazado. Ojala
pudiera hacerlo sin que haya una reacción, pero es una realidad que tengo que
aceptar. Me siento como en un callejón sin salida.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario