En un artículo publicado en la revista
Prog, Rick Wakeman habla sobre sus distintas colaboraciones durante los setenta
cuando estaba en lo más álgido de su producción, bien con Yes bien en
solitario. Estos son algunos de los personajes sobre los que habla el genial
mago de los teclados.
OZZY OSBOURNE
Yes acompañaron a Black Sabbath
por América en los principios y Ozzy y yo siempre nos hemos llevado bien. A causa
de mis enfermedades derivadas del alcohol, no he bebido en los últimos veinte
años, pero entonces yo era un bebedor serio, como todos los Sabbath, así que éramos
como una casa en llamas, coincidiendo todos en que nos gustaba beber por beber.
Cuando coincidimos en la gira de Fragile siempre tenían un asiento libre en su
avión privado, por lo que viajé con ellos muchísimas veces. Literalmente no te
tenías que mover para emborracharte en ese avión. Ozzy se atiborraba tanto como
yo, lo cual era tanto como era humanamente posible.
¿Estaba Ozzy en sus cabales cuando
trabajé en el Sabbath Bloody Sabbath? No creo que nunca estuviera en sus
cabales. En verdad pienso que Ozzy es muy listo porque tiene ese don de parecer
estar fuera de control cuando en realidad lo domina todo. Nunca lo vi hecho
polvo a la hora de actuar.
En verdad que mostró su
versatilidd cuando hizo "Buried Alive" conmigo y la London Symphony Orchestra para
el Return to the Centre of the Earth de 1999. Le pedí que hiciera un tema, me
preguntó quién estaba y cuando le dije que con la London Symphony Orchestra y con
el English Chamber Choir, mas o menos me contesto, pero con
palabras menos corteses: “¡Bendita mi alma, suena como un regalo!”
LOU REED
Nos conocimos cuando hice las
sesiones de Lou Reed en los Morgan Studios de Londres. El Studio One estaba
arriba y la sala de control un piso más arriba. Todos los involucrados esperábamos
abajo del todo, en el bar. Algo que no era tan descabellado para mí en aquellos
días. Creo que había otra sesión en otro estudio porque Rolf Harris estaba
también allí, como, por algún motivo que desconozco, también estaba Ronnie Barrer.
Así que esperabas hasta que te
llamaba Lou. Un poco como en la consulta del médico. Finalmente alguien vino y
me dijo: “Rick, Lou ya está preparado para que entres.” Así que subí y vi que
el estudio estaba oscuro como el betún, a no ser por la lámpara que había en el
piano. Puse el culo en el asiento y escucho la voz de Lou en mi oído: “Voy a
tocarte esta canción y quiero que toques el piano muy rápido por encima. Asegúrate
de tocar muy rápido.”
Toqué unos cuantos fragmentos de
canciones y se fue: “Gracias, Ha sido genial.” Me levanté, las luces se
encendieron, me dio las gracias y me fui por la puerta. Fue una sesión muy
extraña. Siempre fue agradable conmigo, pero me imaginaba que tenía muy mal
humor.
MARC BOLAN
La primera vez que conocí a Marc
no tenía donde caerse muerto, ni yo tampoco. Nos íbamos al bar de la
hamburguesería Wimpy en Oxford Street y el que tenía dinero pagaba las
Coca-Colas. Creo que hice las sesiones de “Get it on” porque necesitaba el
dinero del alquiler.
Me entendía bien con Marc. Era
una persona muy amable y todas las mujeres querían ser su madre porque era un chico
diminuto. Pero también tenía un componente apasionado. Recuerdo una vez en 1970
cuando tuvo una bronca con su compañía de discos porque había una canción que él
quería grabar y alguien de A&R decía que no. Decidió formar un grupo sólo
para grabar esa canción y marcharse de allí. A medianoche nos colamos en el
estudio y grabamos esa canción, “Oh baby”, como Dib Cochran and the Earwings. Si
encuentras una copia, sé de alguien que pagará cinco de los grandes por ella.
DAVID BOWIE
Cuando trabajabas como músico de
sesión en aquella época, la mayoría de artistas te hacían hacer cincuenta tomas
y sabías muy bien que iban a utilizar la primera. David fue todo lo contrario
cuando trabajé en Space Oddity. Llegué a los Trident Studios, me senté en el
mellotrón y después de la primera toma, me dijo: “Ya está.” Le dije que solo
había estado allí 25 minutos. Pero Bowie no pierde el tiempo en el estudio. Nunca
tiene a nadie aprendiendo los fragmentos allí, piensa que eso es una tomadura
de pelo.
Nos hicimos buenos amigos y tardó
poco en invitarme a su casa. Él vivía en Becknham. Todo el mundo lo llamaba
Beckenham Palace mucho antes de Posh y Beck. Recuerdo estar sentado en aquella
habitación mientras cogía su guitarra de doce cuerdas y me tocaba las canciones
que formarían parte de Honky Dory. Había hecho sesiones durante muchos años,
pero nunca había oído tantos temas que fueran tan buenos.
Años más tarde fui a Bowie a
verlo tocar en un concierto y me dijo que quería formar una banda que se
llamara Spiders from Mars y quería que Mick Ronson y yo estuviéramos en ella. Pero
fue el mismo día que recibí una llamada de Yes. Era como si te pidieran fichar
por el Manchester United o el Chelsea. Escogí a Yes porque en los Spiders,
David siempre iba a ser el líder.
ELTON JOHN
Te podría sorprender si te dijera que Elton no
perdió los estribos durante la grabación de Madman Across the Water. Creo que
Elton es un mundo, pero la verdad es que no soporta a los tontos. Es como un
detonador, como yo. Porque cuado intentas lograr algo musicalmente y alguien no
ha hecho su trabajo, todo se puede arruinar.
Conocía realmente a Elton antes
de la sesión de Madman. Cuando “Your song” se publicó en 1971, dio un concierto
en el Royal Festival Hall y yo estaba en su grupo tocando el Hammond. Era un
pianista buenísimo, pero nunca le gustó tocar el órgano.
Creo que su status de celebridad es brillante en estos días. Yo también pasaría
el rato con los Beckham si pudiera. El caso es que él no tiene que pasar el
rato con ellos para salir en los periódicos. En realidad, tengo el máximo
respeto por todo lo que ha hecho. Y si las rabietas son parte de su maquillaje,
entonces que así sea.
JOHN ENTWISTLE
De vuelta a la década de los
sesenta, había pubs a los que la gente, cuando se levantaba, iba y mi local
favorito era uno de ellos. Así que me iba al Red Lion –era menor de edad, pero
eso no importaba-, y me invitaban a tocar con todos aquellos grandes músicos. John
Entwistle vivía a la vuelta de la esquina y acudía allí también. Tenía sólo
dieciséis cuando lo conocí por primera vez en 1965.
A ambos nos contrataron para
alguna sesión de la BBC
por entonces y llegamos a ser buenos amigos. Más tarde vendría a mi programa de
televisión Gas Tank y tocaba un solo de bajo en medio de esa pieza que habíamos
improvisado. Su solo en los ensayos era bueno, pero cuando actuaba se superaba
ampliamente. Nos dejaba con la boca abierta. Y decía algo así como: “¿Así ha
estado bien?”
Echo mucho de menos a John. Fue a
ver a los Who en el Madison Square Garden dos semanas antes que muriera en
2002. Me senté con Pete Townshend y le dije: “Dios, echo de menos al cabrón.” Era
un personaje único y revolucionó el modo de tocar el bajo.
CILLA BLACK
Ella venía a las sesiones y llamaba
cariñosamente a todo el mundo ‘pollo’. Estaba en la sala de control, por lo que
recuerdo, y a nosotros, humildes músicos, sólo se nos permitía entrar cuando se
nos invitaba. Al final nos dijo a todos, y no puedo evitar un acento de
Liverpool, “muchísimas gracias a todos, pollos.”
La he visto un par de veces después,
años más tarde, pero en aquella época hizo miles de sesiones y no creo que se
acordara de mí. No creo que sea nada malo que se hiciera presentadora. Creo que
fue muy buena como anfitriona en el programa Cita a Ciegas.
JON ANDERSON
La primera vez que vi a Jon fue
cuando Strawbs telonaron a Yes en Hull. Abríamos el concierto y yo había oído
todo de Yes, así que después de actuar me senté detrás del escenario y los
estuve viendo. La mayoría de los cantantes de la época eran altísimos y tenían
el pelo grasiento y va y llega este diminuto personaje con voz de contralto.
La prensa tenía carnaza con
nuestra relación porque yo comía carne y bebía cerveza y él era un vegetariano
abstemio. Decían que nos enfrentábamos continuamente, lo cual era ridículo. Quiero
decir que tuvimos discusiones fuertes y con frecuencia se nos escuchaba gritar
por algo que había salido mal. Al día siguiente leías: “¡Yes se separan!” La
verdad es que nunca fue algo físico. El mide la mitad que yo. Jon y yo hicimos
una gira como dúo el año pasado y nos recordaron la basura que se leía en la
prensa. Me explico. ¡La de veces que he leído que Keith Emerson y yo nos odiábamos!
Una vez estábamos comiendo Keith y yo en Londres y por lo menos tres personas
se acercaron a decirnos lo bueno que era que nos hubiéramos reconciliado.
[Keith, que tiene un gran sentido del humor, se dirigió a ellos y les
dijo: "Sí, era sólo una cuestión de tiempo que uno de nosotros matara al otro." N.d.trad.]
THE BEATLES
Los conocí a todos, pero nunca
los vi en directo. George Harrison me dijo una vez: “Bueno, no te has perdido
mucho porque de todos modos no hubieras podido escucharnos.” Siempre me acuerdo
cuando pasé un par de días con él en Cannes mientras paseábamos por la playa y
hablábamos desde la paz mundial hasta Vietnam. Paseábamos durante dos horas
arreglando el mundo.
JIMI HENDRIX
Nunca conocí a Hendrix. Me hubiera
encantado haberlo visto. Era único en lo que hizo y cómo lo hizo. Pero, como a
un motón de otras personas, sólo puedo verlo en película.
FUENTE: PROG MAGAZINE
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